Intentar sorprender a tu novio con un viaje puede resultar realmente complicado; por una parte requiere mucha planificación y trabajo, por otra, todo el esfuerzo podría echarse a perder si descubre de alguna forma el secreto. De todas formas, si desde hace un tiempo has estado pensando en realizar unas vacaciones de ensueño con él o simplemente alejarte de la ciudad por un fin de semana, un viaje sorpresa es lo ideal. Para poder disfrutar de un perfecto resultado, debes enfrentar el reto de esta sorpresa, considerando todos los detalles como la organización del calendario y teniendo en cuenta los siguientes pasos:
Necesitarás:Reduce las posibilidades; piensa en todas aquellas actividades que tu novio disfruta haciendo e intenta combinarlas con los lugares que siempre ha querido visitar. Crea una pequeña lista de ideas, por ejemplo: hacer rafting en algún río de Francia o visitar una bodega en la Rioja. Compara todas las opciones teniendo en cuenta el presupuesto del viaje, así como la cantidad de tiempo que podríais pasar fuera de casa.
2Realiza la reserva del viaje; escoge el trayecto que te gustaría hacer y revisa que todos los detalles sean correctos antes de reservar y pagar. Presta atención al precio de los hoteles, vuelos y alquiler de coche antes de comprometerte con alguna compañía, recuerda que Internet puede ofrecerte una variedad monetaria sorprendente.
3Organiza tu calendario; intenta que tu viaje sorpresa cuente con el soporte de su familia, amigos y compañeros de trabajo para que te ayuden con la organización de su agenda. Además, de esta manera siempre podrás contar con ellos para que entretengan a tu pareja mientras tu ordenas las ideas de las vacaciones que estás preparando.
4Dale pistas sobre su sorpresa; una vez lo tengas decidido, sé creativa y déjale pequeños indicios alrededor de su casa o en su coche: folletos con información acerca de la ubicación o de alguna actividad que vaya a realizar.
5Regálale los billetes de avión cuando menos se lo espere como, por ejemplo, al llegar a casa después de un duro día de trabajo.