Dirigir una organización sin fines de lucro es a menudo una alternativa atractiva para cualquiera que sienta que la América corporativa ha perdido su bienvenida. Dedicarse a ayudar a una buena causa es una manera noble de ganarse la vida y no es una mala manera de ganar un sueldo, incluso si no es exactamente lo que solía ganar. Dicho esto, al igual que cualquier trabajo, las organizaciones sin fines de lucro vienen con sus desafíos. Las tareas de recaudación de fondos son implacables, y puede ser un desafío seguir encontrando nuevas formas de obtener donaciones en el banco.
Las subastas son excelentes formas de recaudar dinero para una causa, ya sea como un evento propio o como parte de un evento más grande. Las subastas silenciosas son bastante populares porque son discretas y bastante fáciles de organizar. Los postores caminan casualmente, generalmente con un cóctel de cortesía en la mano, pujando por los bienes y servicios donados que se muestran en una mesa grande. Si ve algo que le gusta, simplemente escriba su oferta en la hoja. Todo está a la vista, por lo que puede ver lo que la persona antes de ofertar y decidir si quiere subir la apuesta. Cuando finaliza la subasta, el mejor postor gana el premio.
Si este tipo de evento se ha vuelto demasiado estándar para su organización, ¿por qué no mezclarlo un poco y considerar un tipo diferente de subasta silenciosa? Una subasta china es esencialmente la combinación de una subasta silenciosa y una rifa. En lugar de tener hojas de ofertas, los postores compran boletos y los usan para ofertar por premios. Cuanto más quieras algo, más boletos pondrás en el frasco para aumentar tus probabilidades de ganar. ¿Suena como una alternativa divertida a la subasta silenciosa estándar? Siga leyendo para conocer las reglas y regulaciones de una subasta china.