Las bandejas de comida no siempre son saludables o deliciosas a la vista. Ver más fotos de almuerzos escolares. Los almuerzos escolares sufren un problema de imagen. La carne misteriosa, las papas fritas que obstruyen las arterias y las verduras empapadas son el estereotipo, y mucha controversia pulula en la bandeja del almuerzo. ¿Es la comida lo suficientemente saludable? ¿Están recibiendo los niños los nutrientes que necesitan? Todo el mundo parece tener una opinión. Pero, ¿alguna vez te has preguntado exactamente quién decide lo que comen los niños en la escuela?
El Programa Nacional de Almuerzos Escolares
La mayoría de las escuelas estadounidenses participan en el Programa Nacional de Almuerzos Escolares (NSLP, por sus siglas en inglés), que proporciona almuerzos gratuitos o de bajo costo a más de 30 millones de niños al día. Promulgado como ley en 1946 por el presidente Harry S. Truman, el gobierno implementó originalmente el programa para absorber los excedentes agrícolas y, al mismo tiempo, proporcionar comidas a los niños en edad escolar.
Cualquier distrito escolar o escuela independiente sin fines de lucro que participe en el NSLP recibe subsidios en efectivo y alimentos del Departamento de Agricultura de EE. UU. (USDA). A su vez, las comidas de la escuela deben cumplir con los requisitos federales de nutrición. Estos requisitos nutricionales son los siguientes:
- No más del 30 por ciento de las calorías de la comida pueden provenir de la grasa.
- Menos del 10 por ciento de las calorías de la comida pueden provenir de grasas saturadas.
- Las comidas deben proporcionar un tercio de la cantidad diaria recomendada (RDA) de proteínas, vitamina A, vitamina C, hierro, calcio y calorías.
Vale la pena señalar que muchos expertos sienten que estas pautas federales de nutrición están desactualizadas y que los alimentos distribuidos por el NSLP no son mucho más saludables que algunas comidas rápidas. El chef de la Casa Blanca del presidente Obama, por ejemplo, afirma que las comidas del NSLP tienen un alto contenido de grasas, conservantes y jarabe de maíz con alto contenido de fructosa. Los críticos del NSLP también creen que los cabilderos agrícolas influyen en los alimentos y productos básicos donados a las escuelas a través del programa [fuente:Parker-Pope]. Tanto los padres como los expertos en nutrición piden una revisión completa del programa [fuente:Waters, Heron].
Cumplir con los requisitos
Las escuelas cumplen con los requisitos del programa para los almuerzos escolares de cualquier manera que elijan, siempre que la nutrición cumpla con las pautas federales. El NSLP se implementa a nivel nacional y se administra a nivel estatal. Las autoridades escolares locales toman decisiones sobre los alimentos y las comidas específicas que se preparan y sirven. El USDA brinda al personal del servicio de alimentos pautas para preparar comidas nutritivas, a través de un programa llamado Team Nutrition. Estos recursos ofrecen consejos para hacer que la comida de la cafetería sea más saludable, con estrategias para reducir la grasa, el sodio y retener la mayor cantidad de nutrientes posible.
Desafíos presupuestarios
Proporcionar almuerzos escolares saludables con un presupuesto limitado es un desafío. La mayoría de las escuelas hoy en día ni siquiera tienen cocinas completas debido a los recortes presupuestarios para el almuerzo escolar. En cambio, la comida se prepara fuera del sitio y simplemente se calienta y se sirve en la escuela. Además, aquí hay un hecho poco conocido sobre el NSLP:el dinero de reembolso dado a las escuelas también debe cubrir todo, desde los servicios de limpieza hasta la calefacción de la cafetería. Por lo general, las escuelas reciben alrededor de $2.50 por cada comida que sirven.
Alternativas de almuerzo escolar
Algunos distritos escolares pueden considerar que el NSLP no es satisfactorio y optar por implementar alternativas o complementar el NSLP. Por ejemplo, el programa Farm-to-School tiene como objetivo conectar las escuelas con las granjas locales. Los estudiantes aprenden sobre el viaje de sus alimentos "de la granja a la mesa", y los productos locales aparecen en las comidas escolares. Los huertos escolares también brindan oportunidades para la educación nutricional, así como productos para completar las ofertas de la cafetería. Por supuesto, estos programas requieren dinero y recursos, y depende del distrito escolar descubrir cómo obtenerlos.
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