Ya sea que sea un panadero experimentado o un entusiasta de la repostería a tiempo parcial, probablemente al menos sepa que la mantequilla es el elemento esencial para hornear que agrega un rico sabor y una textura delicada a los productos horneados. Como la mayoría de las fases de una cocina exitosa, hornear requiere una buena cantidad de preparación de su parte para garantizar un resultado delicioso.
Un paso que sueles ver en los libros de cocina y recetas en línea es ablandar la mantequilla antes de mezclarla con el resto de los ingredientes. Básicamente, ablandar la mantequilla simplemente significa llevarla a temperatura ambiente. La razón por la que desea ablandar la mantequilla es que probablemente la batirá con otros ingredientes, generalmente azúcar. Eso es casi imposible de hacer con mantequilla fría y dura. Pero si tiene mantequilla blanda, batirla, para agregar burbujas de aire muy necesarias a su masa, es mucho más fácil. Aquí hay cinco consejos para ablandar la mantequilla.
- Sáltate el microondas :Si bien puede parecer una solución rápida y fácil para descongelar la mantequilla helada del congelador, recomendamos enfáticamente resistir la sirena del microondas. ¿Por qué? Un microondas no solo calienta la mantequilla de manera desigual, sino que también puede derretirla también mucho, dejándolo inutilizable.
- Planifique con anticipación :La repostería exitosa no solo requiere talento sino también excelentes habilidades de gestión del tiempo. La mejor manera de ablandar la mantequilla para una receta es sacarla del refrigerador o del congelador una o dos horas antes de comenzar a hornear. Consejo profesional:enciende el horno o la placa de cocina a un nivel muy bajo y coloca la mantequilla envuelta en un plato encima para acelerar el proceso.
- Cortarlo :Si está lidiando con mantequilla dura y obstinada que parece que no se descongela, intente cortarla en trozos. El área de superficie añadida golpeará el aire caliente más rápidamente y se ablandará más rápido. También puedes rallarlo en un rallador de queso... siempre que puedas resistir la tentación de comerlo como si fuera queso.
- Prueba el método del rodillo :Aquí hay uno que es tan divertido como efectivo. Coloca una barra de mantequilla entre dos hojas de papel encerado. Coloque la mantequilla sobre una superficie plana y alísela con un rodillo. Puede extenderlo como si fuera masa o simplemente aplastarlo.
- Dale un "baño" a tu mantequilla :Calentar un poco de agua en una olla. Coloca la mantequilla en un recipiente resistente al calor y colócala dentro de la olla con agua. Esto crea una caldera doble casera que ablandará la mantequilla rápida y fácilmente.
Publicado originalmente:18 de noviembre de 2020