Pocas recetas sencillas satisfacen tanto como una clásica sopa de champiñones. Esto se debe a que los champiñones tienen un alto contenido de umami, el "quinto sabor", que se traduce aproximadamente como salado. Esta versión fácil requiere hongos cremini y shiitake, los cuales tienen notas profundas y terrosas. La clave para una sopa lujosamente espesa son las papas rojas, que no distraen el sabor de los hongos, pero agregan almidón y cuerpo. Ah, y una llovizna de crema espesa no duele. Agregue masa madre tostada y untada con mantequilla para convertirla en una comida completa y sirva un vino blanco seco o un tinto ligero para complementar los sabores.Nota principal de Lindsay Maitland Hunt