¡Salud por estos pastelitos de jengibre y lima infundidos con vodka que saben como un cóctel Moscow Mule!
Precaliente el horno a 350°F. Cubra veinticuatro moldes para muffins de 2 1/2 pulgadas con moldes para hornear de papel; reservar.
En un tazón grande combine la mezcla para pastel, los huevos, el agua, el aceite, la ralladura de lima, 1/4 taza de jugo de lima, el vodka y 1 cucharadita de jengibre. Batir hasta que esté combinado. Bate a fuego medio durante 1 minuto.
Vierta la masa en las tazas preparadas, llenando cada 2/3 de su capacidad. Hornea de 18 a 20 minutos o hasta que al insertar un palillo en el centro, éste salga limpio. Retire del horno; deje enfriar en tazas sobre una rejilla de alambre durante 5 minutos. Retire de los moldes para muffins; enfríe completamente sobre una rejilla.
Para el glaseado, en un tazón grande combine el queso crema y la mantequilla con una batidora eléctrica. Batir la mitad del azúcar en polvo hasta que la mezcla esté suave. Agregue de 2 a 3 cucharaditas de jengibre y 1 cucharadita de jugo de lima. Agregue suficiente azúcar en polvo restante para que quede suave y untable. Extiende o canaliza el glaseado sobre los cupcakes según lo desees. Adorne con ralladura de lima adicional o jengibre confitado.